Ni el sexo, ni la raza, orientación sexual o condición socioeconómica, deberían ser un límite para jugar futbol. De hecho no lo es, y esta historia es otra prueba de esto; ocurre en Portugal, y este es el primer equipo ‘LGBTIQ+” del país. Lo que nos muestra que este deporte trasciende todos los ”límites” que le han sido socialmente establecidos.
in Rituales de pásion – 16 de dezembro de 2022